Cómo hacer la cama perfectamente

Hacer la cama es una tarea diaria, y muchos no ponemos demasiado énfasis en ella. Hay quienes ni se molestan en hacerla todas las mañanas! Pero si te fascinan las camas perfectamente hechas como las de los hoteles, o si deseas impresionar a tus invitados con una cama hermosa, bien hecha que invite al descanso, entonces este artículo es para tí, pues te daremos los trucos para hacer la cama perfectamente. Considéralo, pues una cama bien dispuesta contribuye enormemente con la sensación de orden y confort que buscamos en nuestros lugares de reposo.

  • Reúne tus elementos: para una cama perfecta, necesitarás un protector para el colchón, una sábana esquinera, una lisa, fundas de almohadas, manta, un duvet o edredón, cobertor para el box-spring (en caso de necesitarlo) y cojines para decorar.
  • Plancha tus sábanas: yo detesto planchar, pero este es un paso imprescindible para tener una cama deliciosa, fresca y sin una arruga. No olvides las fundas de almohadas y la cubierta o falda del box-spring.
  • Centra y alínea el cobertor del box spring o las faldas de la cama: no todos tenemos la costumbre de colocar faldellines a la cama, pero considéralo pues la habitación lucirá más estética si cubres el hueco bajo la cama (además, puede tapar las cosas que tal vez tengas almacenadas allí). Asegúralas en su lugar con imperdibles.
  • Coloca el protector del colchón: trata de que quede liso, sin arrugas o montículos. Ajústalo con algunos imperdibles, para que no se salga de su lugar, pues este protector debe ser como una segunda piel del colchón y te ahorrará mucho trabajo si está bien colocado.
  • Coloca la sábana esquinera: Para ello es imprescindible que sea del tamaño adecuado para la cama. Los elásticos de las esquinas deben quedar debajo del colchón, para que no se salga de su lugar. Nuevamente, puedes asegurarlo con imperdibles. Estíralo y deja el sobrante de tela bajo el colchón.
  • Dobla la sábana lisa: centra la sábana en la cama, alineándola y dejando caer los extremos a los lados en igual proporción. Estira la parte superior y alineala con el borde del colchón. Un truco: puedes plancharla rápidamente sobre la cama para que quede perfecta.
  • Coloca la manta sobre la sábana, alineándola con la sábana y doblando la parte superior de esta sobre si misma para dejar libre la zona donde irán las almohadas. Acto seguido, mete los extremos de la sábana y manta debajo del colchón. Ten cuidado con las esquinas: dobla los extremos hacia dentro antes de meterla bajo el colchón.
  • Dependiendo de la época del año, puedes dejarla tal cual está o colocar sobre todo esto un delicioso y esponjoso cobertor y sobre éste, las almohadas. Luego los cojines. Ya tienes una cama muy bien hecha.

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